13 noviembre 2011

A MANERA DE PROLOGO.

A MANERA DE PROLOGO.

Una de mis ilusiones, ha sido, escribir un libro con base en mis recuerdos y experiencias tenidos a lo largo de mi existencia, desde luego que reconozco, que, mis conocimientos en cuanto a la literatura, son muy elementales, ya, que lo que pudiera decir que he aprendido, lo he conseguido empíricamente a través de los años.
Hay un proverbio árabe que dice: “Si quieres dejar huella de tu vida, a tu paso por la tierra, engendra un hijo, siembra un árbol ó escribe un libro”.
Pues bien, creo que yo he cumplido con las dos primeras opciones, pues con mi esposa, hemos procreado cuatro hijos, que me han dado yá nietos y dos bisnietas, faltándome en consecuencia, escribir el libro, y por tal razón, hoy doce de Diciembre del año 2008, día de la santísima virgen de Guadalupe, de la cual soy devoto, a la edad de ochenta años, doy comienzo a verter al papel, mis recuerdos, producto de los sucesos y experiencias que me han tocado vivir.
También lleva el mensaje sincero, de que éste libro sea leído por mis hijos, mis nietos y demás familiares a su tiempo, para que tengan una visión imaginaria, de los tiempos tan bonitos que me tocaron vivir y que comprueban, que todo tiempo pasado fue mejor y que de alguna manera me recuerden siempre.
Cuando uno recuerda diversos pasajes de su vida, que de alguna manera dejaron una huella, se siente como que se vivieran de nuevo, como en un sueño; es por ésta razón, que estoy poniendo a éste pequeña obra el título de: “Recordar es vivir” ó “Añoranzas de un Huacalero”.
Enrique Zamora García.
“ZAGAR”.

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